La Guardia Civil intercepta un coche con 60 kilogramos de hachís

Zaragoza | La Guardia Civil de Zaragoza aprehendió ayer 60 kilogramos de hachís que un hombre, nacido en Marruecos, transportaba en un turismo de alquiler. Los agentes lo arrestaron por un delito contra la salud pública y le requisaron el dinero que llevaba y un teléfono móvil.

Según informaron ayer fuentes de la Comandancia de Zaragoza, la operación fue fruto de los servicios que la Guardia Civil tiene establecidos en prevención del tráfico y consumo de drogas en la provincia y de los controles que de forma continua hace en carreteras y autopistas. Así, en la madrugada de ayer, los agentes interceptaron un turismo de alquiler que circulaba con sentido a la capital.

En el interior del maletero del vehículo, los funcionarios localizaron en dos paquetes encintados un total de 60.000 gramos de hachís, que fueron aprehendidos.

El coche era conducido por un hombre indocumentado, al parecer nacido en Marruecos, de 26 años de edad, que manifestó ser ciudadano holandés. Esta persona fue detenida como presunta autora de un delito contra la salud pública. Además, las Fuerzas de Seguridad le intervinieron un teléfono móvil y 330 euros.

La droga, al parecer, procedía de Barcelona y se está investigando su destino final. Las diligencias, junto con el detenido y los efectos intervenidos, fueron puestos a disposición judicial. La droga requisada fue entregada en los servicios de Sanidad.

Esta operación se suma a la llevada a cabo el pasado miércoles, también por la Guardia Civil, cuando detuvo en Zaragoza a cinco personas y se incautó de 5,7 kilos de cocaína. Los arrestados fueron dos hombres y tres mujeres de edades comprendidas entre los 19 y los 53 años, de nacionalidad dominicana.

Los agentes interceptaron en la capital aragonesa un turismo en cuyo interior había 5.700 gramos de cocaína. Posteriormente, en una vivienda, se intervinieron una báscula de precisión, cuatro teléfonos móviles, dos ordenadores portátiles, 4.410 euros y documentos y justificantes de envíos de dinero al extranjero.

La droga procedía al parecer de la República Dominicana y era transportada por avión hasta Madrid y desde allí hasta Zaragoza capital. Con ella se proveía a distribuidores en las provincias de Zaragoza y Navarra.