viernes, 7 de diciembre de 2007

Reabren la ruta del narco

Yucatán, clave en el tráfico entre Florida y América del Sur

Los traficantes de drogas han reanudado la antigua ruta Sudamérica-Península de Yucatán-Florida para el trasiego de enervantes, aprovechando el relajamiento de la vigilancia por parte del gobierno de Estados Unidos, que está más ocupado en las guerras de Iraq y Afganistán, dice un experto en el tema.

Según Elías Razur Antonio, director del Observatorio Mexicano sobre las Drogas e investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana, esto ha ocasionado el enfrentamiento entre los carteles de Sinaloa y del Golfo por el control de los puertos aéreos, marítimos y terrestres de la península yucateca, “lo que puede explicar los recientes acontecimientos registrados en Yucatán relacionados con el narcotráfico”.

Poca vigilancia —Cada vez más la cocaína se transporta por aire a Estados Unidos a través de la Florida, en lugar del suroeste de ese país —dice Razur Antonio, especialista en temas de tráfico de drogas, entrevistado desde la ciudad de México.

— En los últimos dos años las autoridades estadounidenses y mexicanas han observado un regreso a las rutas caribeñas de trafico de drogas, debido a la disminución en la vigilancia en esa zona por las guerras de Afganistán e Iraq —dice el investigador.

—Para los narcos ahora es más fácil volar entre Sudamérica y Florida.

El resultado, afirma, es el aumento de la venta de aviones de medio uso en la Florida para el tráfico de drogas.

—La aeronave que se desplomó en septiembre en Tixkokob con 3.5 toneladas de cocaína, por ejemplo, había sido vendida en el aeropuerto de San Petersburgo-Clearwater, en Florida, en el mismo lugar donde se vendió el DC-9 que aterrizó en Ciudad del Carmen, Campeche, el año pasado con cinco toneladas de cocaína.

Según el investigador, la rehabilitación de la ruta Sudamérica- Península de Yucatán-Florida, muy usada en la década de los ochenta, propició una lucha que aún no termina entre el poderoso cartel de Sinaloa, comandado por Joaquín “El Chapo” Guzmán, y el cartel del Golfo, que se enfrenta a serios problemas para mantener su cohesión operativa, luego de la extradición de su jefe, Osiel Cárdenas Guillén, a Estados Unidos.

Lucha sin cuartel Ambos carteles se estarían disputando el control de los puertos de acceso y de las rutas para el tránsito de enervantes en la zona, dice Razur Antonio.

—Históricamente Yucatán ha sido una zona bajo el control del Cartel del Golfo, como punto de abastecimiento o de almacenamiento. Hasta hace poco tiempo altos dirigentes de ese cartel tenían bodegas y casas de seguridad en el Estado.

—El poderoso miembro del cartel Jesús Enrique Rejón Aguilar, jefe de esa organización en la estratégica plaza de Nuevo Laredo, abrió una casa de seguridad en Mérida en 2004.

En efecto, el Diario publicó en diciembre de ese año que agentes de la Unidad Especializada contra la Delincuencia Organizada (Siedo) de la Procuraduría General de la República (PGR) vinieron especialmente de la ciudad de México, catearon y aseguraron el predio, ubicado en el lote número 394 de la calle 36 diagonal entre 13 y 15 del fraccionamiento Montebello, propiedad de Miguel Salinas Cornejo, cuñado de Osiel Cárdenas Guillén.

Salinas Cornejo habría comprado la propiedad a Rejón Aguilar, quien a su vez la adquirió de un empresario yucateco.

Los más poderosos El Cartel de Sinaloa, dice Razur Antonio, que se ha convertido en la principal y más poderosa organización del tráfico de drogas en México, está disputando el control de las revaluadas rutas del Caribe con lo que queda del Cartel del Golfo.

Hay quienes afirman, sin embargo, que esa batalla ya está terminada y la plaza quedó en manos del Cartel de Sinaloa, que tiene en Yucatán casas de seguridad y bodegas.

El reciente asesinato de un narcotraficante en una casa de seguridad (Carlos Enrique Hevia Morales, ocurrido en un predio del fraccionamiento Campestre) podría, no obstante, ser consecuencia de otra circunstancia, dice el investigador.

“Calle por calle“ “Ese crimen podría ser parte de la lucha interna en el Cartel del Golfo. Ante el encarcelamiento de su líder, ahora las células que quedan están luchando, calle por calle, por el control del tráfico de drogas al menudeo en la Península”.—

0 Opina sobre esta noticia: