El poder de la heroína refuerza al Talibán en Afganistán

El vuelco político que se está produciendo en Afganistán, con la unión del Talibán con los traficantes de heroína, fue admitido por el secretario general de la Alianza del Atlántico Norte, Jaap de Hoop Scheffer, en la reunión de Noordwijk.
De Hoop pidió un debate sincero

La madeja afgana desplazó a la tensión en la frontera entre Turquía e Irak en la reunión de los ministros de Defensa de la OTAN en Noordwijk (Holanda). El objetivo central de la Administración de George W. Bush en este encuentro, según informaciones recogidas por Hechos de Hoy, se centrá en poner sobre la mesa de los debates la necesidad de mantener un consenso sobre los objetivos políticos y milatares de la misión de la Alianza Atlántica en Afganistán.

"Nuestra prioridad hoy es nuestra operación en Afganistán. Lo más importante que podemos hacer como OTAN y comunidad internacional es aumentar las capacidades afganas de modo que Afganistán pueda mantenerse de pie", dijo el secretario general de la Alianza del Atlántico Norte, Jaap de Hoop Scheffer, al abrir el encuentro. En la reunión, los ministros de Defensa de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) deberían "hablar con toda sinceridad de las lagunas existentes y de sus remedios" ante las crecientes bajas infringidas por los talibanes, según indicó un responsable norteamericano.

Un plan de rotación de tropas

En ese sentido, De Hoop Scheffer esgrimió la idea de un plan a largo plazo de rotación de las tropas internacionales en las zonas más peligrosas para demostrar la "solidaridad" entre los aliados. "Si se examina la necesidad de una solidaridad política, militar y financiera en Afganistán, pienso que en un cierto momento será necesario aumentar la rotación" en ese país, indicó De Hoop Scheffer.

Estados Unidos, Gran Bretaña, Canadá y Holanda están en primera línea en el sur y este de Afganistán, las zonas más peligrosas para la misión de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF), compuesta en total por 40.000 soldados bajo mando de la OTAN. Los holandeses, que tienen desde agosto de 2006 unos 1.500 soldados expuestos en la provincia de Oruzgan a los ataques de los talibanes, solicitaron la ayuda de sus aliados para reducir en 300 hombres su contingente.

Los traficantes sostienen al Talibán

En estas circunstancias, el debate del Parlamento holandés sobre la extensión del mandato de esos soldados más allá de agosto de 2008, fecha final de su misión, se anuncia difícil. La preocupación de Estados Unidos y Gran Bretaña por una retirada eventual de algún país es aún más grande porque ningún otro aliado se ha ofrecido para reemplazarlo. El aumento del tráfico de heroína, de la cual Afganistán es el principal productor mundial con el 94% del total, agrava la situación, ya que a menudo los traficantes están vinculados con los talibanes a los que aportan medios de financiamiento.

Un alto responsable de la OTAN estimó que tras aumentar sus efectivos en 7.000 hombres en 11 meses, la ISAF, liderada por el general norteamericano Dan McNeill, "dispone suficientemente de efectivos para llevar a cabo su misión". Pero como viene ocurriendo desde hace un año en cada reunión de la OTAN, Estados Unidos y De Hoop Scheffer podrían insistir en reforzar la misión con más helicópteros y aviones de transporte, indispensables para ciertas operaciones.